La imagen de un aspecto juvenil puede llegar a obsesionarnos. Nuestra piel cambia y debemos habituarnos a esa nueva realidad. Abrazar el nuevo aspecto de nuestra piel es tan sano como darle los cuidados que requiere. Si te preguntas cómo cuidar tu piel a partir de los 40, hoy queremos enseñarte a crear un ritual de cuidado con productos naturales para tu piel madura.
Piel a los 40: Necesidades de la piel
Cuando cumplimos cuarenta años, pueden observarse ya (más o menos marcadas) la mayor parte de las arrugas que vamos a tener en la zona facial. El envejecimiento cutáneo provoca que la función barrera se debilite y que sea más complicado mantener la humedad y la elasticidad en la piel.
Además, no solo la edad determina el aspecto de la piel más madura. Las zonas más expuestas al sol tardan menos en manifestar esos cambios. Por ello, es posible que observes alguna mancha solar en el rostro, o cómo la elasticidad va reduciéndose poco a poco. Para retrasar ese momento y ayudar a mantener tu piel hidratada durante más tiempo, vamos a enseñarte cómo crear tu rutina facial diaria a los 40 años.
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